lunes, 11 de diciembre de 2017

The Art Of Listening el documental




El arte de escuchar es un film documental muy recomendable para todos los músicos. Éste abarca gran parte del espectro del mundo de la música desde luthiers hasta compositores y lleva al espectador a un viaje a través de todo el proceso productivo que una obra musical debe atravesar hasta llegar a los oídos del oyente.  Un panorama completo y detallista de cada aspecto de la industria musical.


En el siguiente enlace, se puede ver el documental completo subtitulado en español:



lunes, 4 de diciembre de 2017

Cómo ser artista verificado en Spotify


Ser artista verificado en Spotify significa que esta plataforma puede asegurar a tus fans que el perfil que se muestra con tu nombre artístico sea realmente tuyo y no de alguien que está robando tu marca.

Esto resulta muy útil especialmente cuando algunos nombres son muy comunes ya que permite diferenciarlos a pesar de que se escriban igual.

Hasta Mayo del 2017 para ser un artista verificado en Spotify era necesario tener más de 250 seguidores. Por suerte esto ya no es un requerimiento y cualquier artista puede ser verificado en simples pasos.

Para ser artista verificado, tenés que acceder a Spotify for Artists y listo! ya no es necesario completar un formulario separado. Sin embargo, el alta como artista verificado no es automático y puede tardar varios días.

Ser artista verificado en Spotify te conviene porque podés:

  • Compartir playlists directamente con tus fans
  • Actualizar tu biografía en Spotify
  • Dar diferentes tipos de permisos a diferentes personas
  • Actualizar la imagen de tu perfil de artista directamente desde tu cuenta de Spotify para Artistas
  • Acceder a las estadísticas de tus 1000 canciones más importantes
  • Hacer “selecciones del artista” que aparecerán en la parte superior de tu perfil


lunes, 27 de noviembre de 2017

Los 4 mayores errores que cometen los músicos independientes.





Los músicos independientes se dividen en dos grandes grupos: los que quieren vivir de la música y hacerla su trabajo diario y los que no. Muchos músicos excelentes toman a la música como un hobbie, uno muy importante, pero un hobbie al fin. Saben que nunca les dará dinero y que las bandas o proyectos que creen no serán para toda la vida. Esta visión es la de la mayoría de los músicos. Pero hay casos en donde uno pone todo lo que tiene: horas de trabajo, estudio y dinero. Si ese es tu caso, seguí leyendo porque tal vez puedas evitar algunos errores comunes que te alejan del objetivo principal que es “pegarla” con lo que hacés.


No centrarse en la composición

Este es un error común por demás. No hay otra cosa más importante que esto. Contratar un fotógrafo, tocar en un lugar lindo, tener muchos seguidores en Facebook...todo eso está genial pero no es la esencia. La gente que paga una entrada para verte o que compra tu disco lo hace porque le gusta tu música, nada más. Para progresar con un proyecto musical es vital concentrarse en todos los aspectos que involucra ser un compositor. No importa el método que elijas: podés crear un tema excelente entre todos los miembros de la banda en 5 minutos en un ensayo, como era el caso de bandas como Sex Pistols en donde Glen Matlock componía una base, Johnny Rotten agregaba unas letras, lo repasaban entre todos los miembros y el tema estaba listo. Pero tené en cuenta que Sex pistols fue una de las bandas más innovadoras de su época. Entonces, hay una regla que podemos seguir: mientras menos tiempo y recursos consuma tu composición, más original tiene que ser para generar un impacto verdadero en el oyente.
La música sale de adentro y uno puede buscar inspiración en miles de lugares. Para potenciar esa inspiración, es esencial tener conocimientos realmente técnicos sobre ritmo, armonía, instrumentación o lírica. Mientras mejor manejes todos estos elementos, más sencillo será componer un tema y expresar qué es eso que te sale de adentro. Es algo así como tener un vocabulario amplio, de esa manera podemos expresar mejor nuestras ideas y sentimientos.
Si hacés música propia, tenés que hacerla a conciencia, ponerle todo tu empeño y sabiduría. Recordá que a la gente le gusta la música por sobre todo lo demás que hagas.

No aprovechar los instrumentos del Estado

Muchos artistas reniegan de la efectividad de instituciones como SADAIC, CAPIF o SADEM. Sin embargo, son las que pavimentan el camino al profesionalismo. Por eso, si realmente querés vivir de la música, tendrás que ponerte al día sobre cuáles son tus derechos y obligaciones en esta industria. En este blog podrás encontrar mucha información al respecto.
Además de las sociedades de gestión colectiva que bregan por los derechos de los músicos, existen otras como el INAMU que el Estado habilita para dar beneficios puntuales como subsidios, contratos laborales, etc.

Priorizar las grabaciones

Los músicos aman el estudio de grabación. Eso es una realidad y está bien que así sea porque es un espacio de libertad, de creación y de crecimiento. Sin embargo, muchos músicos se precipitan a grabar ni bien tienen el primer tema “terminado”. Gastar tiempo y recursos en un estudio de grabación profesional es algo que no debería suceder hasta que los artistas estén realmente conscientes de su trabajo, de cómo tocar los temas, de cómo suenan en vivo, de cúal es la respuesta del público, etc.
El estudio de grabación es un lugar donde permanentemente se toman decisiones. Si los miembros no están acostumbrados a trabajar juntos, grabar en etapas tempranas, podría ser el suicidio del proyecto musical y de las relaciones personales.
Si estás empezando con tu proyecto, una buena alternativa al estudio de grabación profesional es la de grabar los ensayos. Esto abre mucho la cabeza y pone al músico en una perspectiva diferente sin tener que gastar demasiados recursos. Muchas salas de ensayo ofrecen este servicio por un módico precio.
El camino correcto que no falla es: conocerse entre los miembros, zapar y hacer covers, componer, hacer arreglos, revisar todo lo anterior, volver a componer, mejorar los arreglos y encontrar el sonido, grabar un ensayo, revisar todo, seguir ensayando y luego grabar todos los temas en el estudio (de a uno termina siendo más caro). Al mismo tiempo que se desarrolla este proceso, tocá en vivo. Todo lo que puedas, porque es un aprendizaje maravilloso.

No definir objetivos

Cada persona es diferente, entonces, cuando se crean grupos humanos, es importante conocerse y charlar. Todo proyecto musical está formado por una o más personas y es necesario que estas se pongan de acuerdo en un montón de cuestiones para que la cosa funcione.
Sería bueno comenzar por definir objetivos personales con respecto a la música. Todos deberían conocer el “background” o la experiencias previas de sus compañeros. Entonces, hablar del futuro será mucho más fácil. Cada uno debería expresar sus deseos, sus intenciones, su nivel de compromiso desde el primer día.
Se pueden plantear planes a corto plazo y a largo plazo, entonces, con los objetivos personales definidos, será más fácil ponerse de acuerdo acerca de los objetivos del proyecto musical a corto, mediano y largo plazo.
En el caso de un proyecto solista, esto es mucho más simple pero es igualmente necesario. Si vas a contratar músicos sesionistas, también sería bueno que tengan en claro cuáles son los objetivos.


lunes, 20 de noviembre de 2017

Cómo armar un stand de merchandising





Si tenés experiencia vendiendo merchandising en tus recitales, sabrás que no es cosa fácil. Sin embargo, la gente que aprecia tu música también aprecia tus productos, es algo que casi siempre sucede. Además, un show es el lugar ideal para vender otros productos además de tu música. Tu público podría descargar gratis tu disco pero le va a resultar complicado conseguir una remera con el logo de tu banda, por lo tanto, deberías darle la oportunidad de poder comprarla en el momento adecuado. A todo esto, es muy importante que hayas definido una estética para tu proyecto musical. La impronta que hayas elegido será lo que dará vida a tus productos y los hará más o menos atractivos.

Elegí los productos adecuados

Parece redundante, pero tal vez esas 500 tazas con tu cara que encargaste no las puedas vender tan fácilmente como pensabas. En este sentido, te ayudaría mucho saber qué es lo que más están vendiendo tus colegas músicos.
Una buena estrategia sería comenzar a ofrecer productos baratos, que tengan un bajo costo de fabricación. Si tenés una banda de rock, tal vez sea bueno comenzar vendiendo púas para guitarra, por nombrar algo barato. Las redes sociales pueden ayudarte a realizar encuestas o a ofrecer regalos y así sabrás el nivel de aceptación de uno u otro producto.

Aprendé sobre stock

Confiá en que venderás mucho. No guardes todo el stock en tu casa, no querrás perderte una venta por no tener suficiente cantidad de productos en el stand. Algunos productos se venderán más que otros pero no podrás saber eso a ciencia cierta hasta que hayas vendido algunos cuantos ejemplares. Mientras más vendas y más conozcas a tus fans, mejor.

Mejor si es un stand dedicado

Si el lugar te lo permite, sería genial que tu stand sea único y que venda sólo productos tuyos. De esa manera, será más identificable y no estarás atado a ningún vendedor asignado por cualquier otro artista. Tener una caja propia también puede evitarte cualquier malentendido y la contabilidad será mucho más simple.
El stand tiene que estar en un lugar visible para que pueda ser el centro de atención luego de tu show. Una vez que termines de tocar, sería bueno que te des una vuelta por allí para dialogar con tus fans.

Hacelo atractivo

Especialmente si va a ser un stand dedicado a tu proyecto musical, no des por sentado que en el lugar te van a prestar una mesa y que siempre habrá un mantel para cubrirla. Llevá tu mesa o lo que sea que hayas pensado que sirve como mostrador. En pinterest podés encontrar muy buenas ideas para armar stands con casi cualquier tipo de material. Sería bueno que contenga elementos característicos de tu propuesta, como tu logo o los colores más característicos.

Vendedor responsable

Una de las cosas más importantes de un stand es su vendedor, la persona que se encarga de atender al cliente. Debe ser alguien que tenga vocación de servicio, alguien que esté allí específicamente para vender, que conozca los productos y pueda asesorar a los fans en cualquier aspecto necesario (historia, próximos shows, duración del show, artistas invitados, etc.). Generalmente, la novia de un integrante podría funcionar bien pero es necesario que esta persona se involucre con el proyecto de una manera especial y lo conozca de verdad.
Una “buena” presencia es fundamental. No decimos que haya una imagen ideal sino que la imagen del vendedor debería ser lo más parecida a la imagen que quieras transmitir como artista. En un show de música pop para niños, no sería buena idea que el vendedor sea un joven de 20 años tatuado, con piercings y botas de cuero, simplemente porque no es el perfil del show.

Creá incentivos

Sería bueno que utilices tu creatividad para crear promociones y beneficios para quienes compren tus productos. Tal vez la venta de merchandising no tenga como objetivo ganar dinero sino crear difusión y llegar a un público diferente, todo depende de tus objetivos. Si bien vender discos en formato físico puede ser difícil debido a la oferta de canciones en formato digital, podés encontrarle la vuelta para que un CD sea atractivo no solo por su música sino porque podés ofrecer otros productos gratis junto con la compra de un CD, por ejemplo.
Si ninguno de los incentivos que hayas creado logra atraer la atención de los que visitan el stand, sería bueno que por lo menos se lleven una tarjeta o algún dato de contacto para que puedan conocer tu mail o redes sociales para futuros contactos.


lunes, 13 de noviembre de 2017

Cuidados vocales para cantantes





Muchas veces los cantantes piensan que teniendo una buena técnica de canto ya es suficiente para no lastimarse las cuerdas vocales. Si bien tener ténicas correctas es importantísimo para producir un bello sonido y no lastimarse, también lo es el mantenimiento y el cuidado diario.
Un guitarrista que rompe una cuerda durante el show, puede instantáneamente cambiar de instrumento o, en su defecto, tomarse unos minutos para resolver el problema. La suerte no es tanta para los cantantes quienes deben asegurarse de no esforzarse demasiado y de mantener los órganos de la garganta en forma para que se puedan utilizar en cualquier momento que se necesiten.
Acá hay algunos consejos para que nunca más pierdas tu voz y cumpla con tus objetivos cuando la necesites.

Ejercitá

La voz se produce a través del uso de varios músculos y, al igual que los abdominales o los bíceps, estos músculos necesitan atención diaria para poder cumplir con las exigencias. Sin embargo, también es bueno tener momentos de descanso. Asigná una rutina de trabajo que comprenda varios días a la semana, pero no todos.
Sea cual sea tu escuela, existen muchas técnicas de ejercitación de canto y muchas están disponibles en internet. Te recomendamos las técnicas de Nicola Vaccai quien fue un excelso cantante de ópera.

Humedad para la zona

En cada show, uno generalmente da todo lo que tiene y hasta llega a los extremos de las posibilidades. Por lo tanto, cada vez que termines un show, sería bueno que trates de hablar lo menos posible y dejes descansar tus músculos. Si tocaste en un boliche ruidoso, lo mejor para tu voz sería salir de allí lo antes posible. Ni bien llegués a tu casa, podrías calentar una olla para obtener agua hirviendo, colocarte una toalla sobre la cara para no quemarte y comenzar a inhalar por la boca todo ese vapor. Probablemente sudes un poco pero tu garganta te lo agradecerá.

Caramelos de miel

Podrías comer uno, junto con abundante agua tibia justo después de haber dado un show. Esto te servirá para calmar cualquier ardor hasta que llegues a la olla con vapor. Simplemente tratá de no abusar y comer más de uno.

Evitá la leche

Tomar leche antes de cantar puede ser un suicidio para tus cuerdas vocales ya que esta ayuda a remover la saliva y el moco que se produce naturalmente en tu garganta. Si vas a cantar, por unas horas antes, tomá solo agua tibia.

Té de jengibre y miel

El jengibre es una raíz muy buena como antibiótico natural pero con un sabor un poco picante, por eso suele tomarse en una infusión con un poco de miel. Luego de cantar, esto es aún mejor que los caramelos de miel.

Agua con bicarbonato de sodio

Esto es especialmente bueno si tenés mucho moco. En un vaso de agua, disolvé una cucharada de bicarbonato y hacé todos las gargaras que puedas. Si tenés mucha flema, a los pocos minutos estarás expulsándola.

Manzana

Mucha gente toma té con limón antes de las presentaciones en vivo pero el limón es sumamente ácido y es contraproducente para la humedad natural de los músculos de la garganta. Las manzanas son diferentes. Son jugosas, dulces y su contenido ácido es bajo. No sería mala idea comer una manzana (sin cáscara) momentos antes de cada show, si te da hambre.

Descanso efectivo

Como se mencionó antes, asigná días de trabajo y días de descanso en donde no cantes ni en la ducha. Tu ritmo de trabajo va a influir en tu decisión pero es importante que dejes de lado ciertos hábitos para que tu voz pueda recuperarse completamente. Una buena iniciativa es hablar poco o nada hasta bien después del desayuno. Los músculos no deberían forzarse hasta haberse despertado.

Ante cualquier síntoma o problema persistente, deberías ver a tu médico clínico.


lunes, 6 de noviembre de 2017

Cómo encontrar tu público




En estos días en donde parece que ciertos géneros musicales han acaparado todo el mercado de la música, puede ser difícil para un proyecto nuevo e independiente encontrar un lugar en la escena. Sin embargo, no es imposible si tenemos en cuenta que la música genera emociones muy diversas a diferentes personas. No importa que tan rara o experimental sea tu música, siempre habrá un nicho de mercado en donde pueda funcionar, aunque te cueste mucho trabajo. Partiendo de la base de que hacés música con un fin comercial, te vas a dar cuenta de que existen diferentes tipos de consumidores ahí afuera y sólo tenés que encontrarlos.

Muchos músicos quieren agotar las localidades a cualquier costo, no les importa si la entrada la compró un amigo de un primo que no tiene ningún interés en escucharlos. Todo sea por llevar gente y que se puedan cubrir los gastos. Con esta visión, se están cometiendo dos errores: dimensionar mal el proyecto tratando de aprender a “correr” antes de aprender a “caminar”, y la de tocar para gente que muy probablemente no le guste lo que hacés.

Se comete el error de pensar que la cantidad es buena en sí misma, pero siempre llega el instante en donde esta creencia se derrumba y comenzamos a cuestionarnos si el proyecto es realmente viable. Un proyecto musical no puede sustentarse de público ocasional que paga una entrada ocasional. Es un deber encontrar la audiencia adecuada que se involucre y que participe de alguna u otra manera. Por eso, es siempre mejor apuntar a la calidad ya sea con tu música o con tu público.
Para que tu proyecto musical encuentre a los oyentes adecuados, debés hacerte unas cuantas preguntas a vos mismo/a:


¿Por qué estás haciendo esto?


Esto te va a ayudar a responder cualquier otra duda que tengas con respecto a tu proyecto. Antes de plantearte cualquier objetivo, deberías definir qué es lo que te motiva para tocar en vivo. Tu respuesta es personal y sería bueno que la compares con la respuesta de tus compañeros del proyecto musical. Una vez que estén de acuerdo con este aspecto fundamental, pueden comenzar a buscar público.


¿A dónde querés llegar?


¿Cómo sería tu show ideal? ¿Te ves firmando discos y sacándote fotos? Estas preguntas son ejercicios mentales que te pueden ayudar a encontrar tu público. Tratá de identificar todos los factores importantes que tendrías que tener en cuenta para llegar a tu público objetivo. Mientras más específico seas, mejor. No digas cosas como “conquistar el mundo” porque es utópico pensar que tu música va a ser un éxito mainstream que llegue al número uno de todos los rankings. Recordá que “la clave para el fracaso es tratar de complacer a todo el mundo”.


¿Cuáles son tus supuestos?


Definí cómo sería el perfil de tu oyente promedio. Qué edad debería tener, si es hombre o mujer, dónde vive, qué artistas debería escuchar además de a vos, qué tanto asiste a recitales, en qué momentos escucha música, cada cuanto, si paga por ella y cuánto, si es músico, si baila, si participa activamente en los shows, etc.
Además, podés basarte en artistas influyentes de tu estilo para hacer una aproximación acerca del tipo de público adecuado. Pero intentá ser cuidadoso porque no hay una misma receta que funcione a todo el mundo. Además, es probable que haya más fans ahí afuera que lo que vos pensás. Hoy en día el tango es furor en Japón ¿Alguien prodría haberlo predicho?

¿Cuál es tu estética?

Una vez que definas lo anterior, tendrías que centrarte en la cuestión estética, es decir, en el mensaje visual. La cuestión estética es muy importante y dice mucho de quién sos como artista y hasta qué lugar ocupás en la escena. Podés comenzar por utilizar recursos estéticos de artistas que ya conozcas e ir adaptándolos a tu propio estilo con el tiempo. Hacer esto es extremadamente importante para encontrar tu público porque la gente que te ve sobre un escenario debe poder encasillar tu estética dentro de un marco cultural conocido de antemano y antes de que termines de tocarles el primer tema.


¿En dónde vas a tocar?


No es lo mismo tocar en una peña folclórica, en un bar de rock o en un boliche. Si querés encontrar a tu público adecuado, tus presentaciones en vivo tienen que darse en ambientes en donde tu música funcione mejor y que fluya con la “onda” del lugar. La mejor manera de saber qué lugares funcionan es conocer cuáles son los artistas que hacen algo similar a vos y dónde hacen sus presentaciones en vivo. Usar tu intuición te puede ayudar mucho. Seguramente opinarás que no es una buena idea tocar música de cámara en un boliche lleno un sábado a la noche. También podés ser creativo e identificar lugares de reunión en donde puedas encontrar públicos nuevos y tu música no desentone con el ambiente.
En un boliche o en un festival te va a escuchar mucha gente, pero tal vez no les interese tu estilo y ni te presten atención. Eso puede ser contraproducente, por lo tanto, insistí con la calidad antes que la cantidad.


¿Vendés sólo música?


Muchos artistas venden una imágen, una estética, un producto completo. Pensá en Pink Floyd, por ejemplo, ellos se han encargado de crear una estética muy original. Podemos relacionar a esta banda con las críticas al sistema educativo, monetario, las guerras, etc. Además, sus shows en vivo son un espectáculo único que pocos artistas tiene el lujo de llevar a cabo. Las tapas de sus discos son icónicas como todo el diseño gráfico que han utilizado. En cuanto a su música, Pink Floyd se distinguió de sus colegas por haber incursionado en novedades técnicas muy raras para su época.
Esto no significa que debas imitar a Pink Floyd ni mucho menos pero lo que sí deberías hacer es preguntarte qué otro valor estás creando además de tu música y tus letras. Si prestás atención, vas a ver que casi todos los géneros musicales tienen cosas que los identifican y los hacen únicos. Un claro ejemplo de eso es la seña de hacer cuernitos con las manos en los recitales de heavy rock.
Como ves, la estética es una parte importante del proyecto y podría ayudarte a diferenciarte y llegar a más gente.


Encontrar gente que se identifique con tu arte es más complicado que sólo pasarles un link de youtube. Muchos artistas utilizan las sociedades con otros artistas para poder llegar a un público más amplio. No sería una mala idea ver qué personaje, ONG, círculo profesional, influencer, academia, etc puede ser susceptible a una unión. Un claro ejemplo en Argentina es la banda de rock La Mancha de Rolando cuyos integrantes son simpatizantes del peronismo y encontraron en la cuestión política una forma de expandir su arte a un espectro de gente mucho mayor utilizando la estética tan característica de los partidos políticos en Argentina.


Crear una base sólida de gente que apueste por vos es importante para cualquier proyecto serio. Internet es especialmente bueno para encontrar gente con gustos en común y para crear comunidades. Así que una vez que definas tu estética, es necesario que la expreses a través de internet y hagas un seguimiento de cómo la gente reacciona a ella. Nunca pierdas la comunicación con colegas y tratá de obtener una devolución por parte de tus seguidores. No sirve que sólo uses tus plataformas digitales para postear cuáles son tus próximos shows. Dale vida a tu comunidad, preguntá, informá y ayudá, en definitiva, está presente en el verdadero sentido de la palabra.


lunes, 30 de octubre de 2017

5 Errores que deberías evitar si contratás músicos





Cada vez que alguien decide organizar un evento es necesario tener en cuenta muchos factores para que todo salga bien. Lo ideal sería que todo salga según lo esperado para que puedas llevar a cabo más eventos en el futuro. No importa si el evento es multitudinario o sólo para unos pocos familiares, no importa si se va a cobrar entrada o no, las cosas que pleanees pueden ir bien o mal. Si estás pensando contratar músicos para un show, no es sólo cuestión de preguntar si tienen disponibilidad y que simplemente toquen. Sería ideal, pero las cosas no funcionan así y si no se tienen ciertos recaudos, pueden darse roces indeseados. Organizar un evento con un show de música en vivo requiere de ciertos recaudos y acá te explicamos cuáles son los indispensables.


Contratar músicos no es algo tan sencillo como muchos piensan y es por la simple razón de que cada uno tiene sus propias reglas y su propio “protocolo” que va a intentar respetar y buscará que lo respetes también vos - en este punto, estamos dando por sentado que la contratación cumplirá con el pago de todos los impuestos necesarios como SADAIC y CAPIF y que se cumplen con los requerimientos mínimos de seguridad-. Si estamos hablando de músicos independientes, entonces la contratación es mucho más simple porque estarías hablando directamente con quien va a estar sobre el escenario. Distinto es el caso de los músicos que forman parte de un sello discográfico porque ellos tienen un manager y condiciones que son menos flexibles aunque tal vez convoquen más gente o el público que asista se sepa sus canciones.

Es importante que asignes prioridades a tu evento ¿Serán los músicos la atracción principal? ¿Tocarán sólo una vez? ¿Habrá que pagar una entrada? ¿Habrá tiempo para un ensayo previo al show? Como sabés, una buena organización tiene en cuenta estos aspectos y muchos más. En otros posteos encontrarás más información al respecto pero acá te damos una lista de 5 aspectos esenciales que no puedes dejar librado al azar.

Contrato escrito

Este aspecto es totalmente fundamental. Una vez que hayas definido todos los puntos claves, anotalos en un papel punto por punto y que el artista te lo firme días antes del show, de esa forma podrás cambiarlo si hace falta y evitar malentendidos.

Sonido y cuestiones técnicas

¿Quién pagará por el alquiler del sistema de sonido? ¿Cuántos instrumentos llevarán los músicos? ¿Habrá algún tipo de backline en el establecimiento? Las cuestiones técnicas son importantes para todo show. Asegurate de saber quién es responsable de los equipos y qué necesitás para tu evento. Averiguá si es necesario trasladarlos o contratar algún seguro contra riesgos.

Viáticos o consumisiones

En tu evento probablemente haya comida, entonces debería estar claro si los músicos tienen permitido probarla o no. Definí si vas a reservar comida y bebidas para los músicos y en qué cantidad.
Duración del show

Duración del show

No es lo mismo un show de 20 minutos que uno de 3 horas. La lista completa de temas podría también estar definida de antemano. Esto está relacionado también con el momento en el cual el artista deba hacer su presentación. Tal vez el músico tenga alguna preferencia por algún horario en particular. Sería bueno que pactaran algo de común acuerdo.

Precio

Así como uno pide el presupuesto para un salón de eventos o para el catering, también debería hacerlo con los músicos. Saber cuánto, cómo y cuándo se les va a pagar puede ahorrarte muchos dolores de cabeza. Si es un evento privado, tenés un poco más de ventaja para tratar estos temas. Si es un evento público, en donde se contrata a los músicos justamente porque llevan público, entonces es importante escucharlos y tratar de llegar a un acuerdo que será bueno para ambos dependiendo de las necesidades de cada parte. Para más información sobre este aspecto, podés visitar: Formas de contratar a un músico independiente.


lunes, 16 de octubre de 2017

Qué es el mastering y para qué sirve






El mastering es el último proceso técnico y artístico que se le aplica a las obras musicales antes de que lleguen al oído del oyente. Todos los músicos profesionales saben que sus discos tuvieron una etapa de mastering pero no todos saben explicar correctamente de qué se trata.


Comencemos por el principio: la creación de la canción. Una vez que uno tiene una obra musical lista en todo sentido, puede introducirse en el estudio para grabarla. La grabación, como su nombre lo indica, es el proceso de crear un registro de lo que se está tocando: ya sean instrumentos acústicos, digitales o voces, que se pueden grabar simultáneamente o no. En otras épocas, ese registro se hacía sobre una cinta magnética pero hoy en día se utilizan DAWs (Digital Audio Workstations, por ejemplo: Pro tools) y todo se guarda en una computadora.

Una vez que se tienen todos los sonidos grabados, se procede a mezclarlos, embellecerlos y a crear un sonido homogéneo entre ellos. Por eso, esta etapa se llama mezcla y es aquí donde se conjugan todos los criterios estéticos que hacen al género musical y a la sonoridad de una obra. Aquí el productor artístico saca a relucir su talento e indica al ingeniero de grabación qué sonoridad debe tener la obra.

Una vez terminada la mezcla, hay que preparar los archivos para enviarlos a masterizar. El ingeniero de masterización suele pedir los audios “consolidados” es decir, un solo archivo de audio por cada canción y que contenga todos los procesos de la mezcla ya aplicados. Además, generalmente se pide que los principios y los finales no estén editados. Otra opción, puede ser que el ingeniero solicite los llamados “Stems” que son pistas de audio que contienen, por ejemplo, el bajo y la bateria por un lado y las voces en otro archivo. Entonces, cada obra grabada tendrá más de un archivo y la cantidad depende de lo que el ingeniero de masterización considere adecuado. Como pasaba con la mezcla, en donde se mezclaban todos los sonidos grabados por separado, en el mastering se busca mezclar todas las mezclas, valga la redundancia, para crear un álbum homogéneo y consistente en todos sus tracks. En la etapa de mastering se definen cosas como el orden de los temas, la conexión sonora entre ellos, la duración exacta, el nivel de volúmen de cada track, se editan los comienzos y finales de los tracks (aquí es donde se crean los “fadeouts” y los espacios previos a los tracks) y, si el formato final es digital, se agregan metadatos y códigos UPC e ISRC (este último otorgado por CAPIF al productor fonográfico).

El mastering tiene la particularidad de ser un proceso muy técnico, es decir, que hay muchas cosas que deben respetarse para que no haya errores y existen ciertos estándares que se pueden aplicar. Por ejemplo, si se va a masterizar para vinilo hay que tener cuidado de no exagerar demasiado los sonidos graves porque esto podría provocar que la púa que lee el disco de algunos saltos. Otra cuestión que hay que tener en cuenta es el nivel sonoro del álbum y la correcta sonoridad para que el álbum suene agradable en cualquier parlante o auricular. En la década de 1990 comenzó la llamada “Guerra del sonido” en donde todos los artistas competían para sonar más fuerte en las radios pero a costa de una disminución drástica de la calidad de sonido. Por esta cuestión, discos importantes como Death Magnetic (2008) de Metallica se han visto seriamente perjudicados. Hace algunos años se está trabajando sobre esta problemática y se han hecho algunos avances para mantener la calidad aunque el sonido promedio de los discos sigue bastante más alto que antes del comienzo de la “guerra”.
A la vez, se dice que es un arte porque el productor artístico y el ingeniero de mastering tratan de buscar un buen balance entre todos los tracks.
Como dijimos, el mastering es el último proceso de la cadena pero seguramente estarás pensando que el último proceso técnico es la replicación del formato físico y sí, tenés razón, pero en realidad ese es el verdadero mastering. El término viene de la época de los discos de pasta que se replicaban a partir de un disco “maestro” o “master”. Pero a partir de la década del 70, la producción artística comenzó a mezclarse con la cuestión técnica del proceso de mastering y las mezclas finales eran retocadas antes de ser replicadas. Se dice que el primer álbum en el que utilizó esta técnica fue Led Zeppelin, de la banda homónima.

El mastering es una etapa fundamental de todo álbum y seguirá siendo así mientras haya una gran variedad de formatos como vemos al día de hoy entre formatos físicos y digitales.